Este increíble dispositivo convierte papel higiénico usado en una nueva almohadilla fresca. Este es el proceso de reciclaje. El reciclaje es una forma de hacer cosas nuevas a partir de objetos viejos e inútiles que ya no necesitamos; lo mismo que cuando la ropa usada se convierte en otro tipo de tela e incluso en juguetes.
Este es un problema urgente que afecta a las mujeres y las niñas en todo el mundo: la pobreza menstrual. Significa que las mujeres y las niñas no pueden manejar sus períodos utilizando los materiales que requieren. Esto podría significar que las personas no asisten a la escuela o al trabajo. También puede ser un problema de salud porque las mujeres están usando alternativas inseguras en lugar de productos sanitarios adecuados.
Pero ahora las máquinas de toallas sanitarias usadas están ayudando a cerrar esa brecha. Máquinas que reciclan las toallas usadas y las convierten en nuevas, las cuales luego se distribuyen a esas mujeres que realmente lo necesitan. También significa que en áreas con acceso limitado a productos sanitarios, las mujeres y niñas pueden obtener los materiales que necesitan para una práctica saludable, algo que de otro modo sería más difícil.
¡No es fácil intentar reciclar una toalla sanitaria sucia! Esto requiere máquinas y tecnología especializadas para convertir algo que ha sido usado en un producto nuevo y seguro. Sin embargo, la máquina de toallas sanitarias usadas que te llevaría a esto, supera con creces las expectativas!
El primer paso es recolectar toallas sanitarias de escuelas, hospitales o centros comunitarios. Son lugares donde probablemente la mayoría de las mujeres y niñas hayan usado las toallas. La toalla usada luego entra en la máquina, que la limpia utilizando calor y presión. Al hacerlo, se asegura que todas las bacterias o gérmenes sean eliminados, y el polvo puede ser reutilizado de manera segura en toallas nuevamente.
La máquina luego desmenuza las toallas en pequeños trozos. Los trozos restantes se combinan con una mezcla de otros materiales como papel o plásticos para producir nuevas toallas sanitarias. El producto final es exactamente igual a una nueva toalla que comprarías en la tienda. Esto garantiza que las mujeres puedan confiar en estas nuevas toallas para el contacto con la piel.
Para la mayoría en el mundo en desarrollo, las máquinas de toallas sanitarias son ridículamente importantes para las mujeres y las niñas. No solo aseguran que las toallas usadas no resulten en desperdicio, sino que también ayudan con la pobreza menstrual. Sus máquinas sirven como un recurso muy necesario para aquellos que luchan por encontrar los productos menstruales que necesitan.
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